El siguiente vídeo, no trataría de jugadores de baloncesto. Tampoco de una escena real. Elegiríamos la escena de una película. Ésta era exagerada; en el sentido de que ningún entrenador, en la actualidad, expondría a uno de sus jugadores a una situación como la que se ve en el siguiente vídeo.
Pero queríamos trabajar, con ellos, el compromiso de los jugadores con el equipo. Además de la importancia que tiene el uso de un lenguaje negativo. Sobre todo, si lo propaga en el grupo, uno de los jugadores más talentosos. O un jugador del que se espera que empuje, hacía adelante, con la moral del resto de jugadores.
Pero queríamos trabajar, con ellos, el compromiso de los jugadores con el equipo. Además de la importancia que tiene el uso de un lenguaje negativo. Sobre todo, si lo propaga en el grupo, uno de los jugadores más talentosos. O un jugador del que se espera que empuje, hacía adelante, con la moral del resto de jugadores.
Veremos el vídeo, os recuerdo que la escena es de una película de ficción, que pretende mostrar...
Le preguntamos a los chavales que les había parecido. Se les veía emocionados, impresionados. Una vez más, levantaron la mano y dejamos hablar a aquellos que no lo habían hecho, todavía. Uno de ellos dijo algo así como; "pienso que si alguien tiene responsabilidad de liderar al equipo en un partido decisivo, no puede caer en el pesimismo". Otro, siguiendo el mismo argumento, dijo; "a veces, mentalmente nos ponemos límites, barreras. Pero no son reales, si nos ponemos con ello, esas barreras mentales pueden que no sean reales, subestimando nuestras capacidades reales. No debemos permitir que nos limiten los pensamientos negativos".
El compromiso de los jugadores con la motivación grupal, con transmitirse un mensaje positivo, sería fundamental para el posible éxito deportivo. Eso había quedado claro, y nosotros seguíamos diciendo; ¡genial!
Comentarios
Publicar un comentario